Hablar de los TNE

No reprima sus deseos de llorar

Llorar es una forma saludable de liberar su estrés, pero le puede costar hacerlo delante de los demás.

• Busque un lugar seguro donde pueda sacarlo todo, lejos de otras personas o distracciones
• Puede resultarle más fácil llorar en privado
• También le puede pedir a un amigo íntimo que le acompañe mientras llora
• Si llorar acaba siendo demasiado agobiante a largo plazo, visite al médico porque podría ser un signo de depresión que puede recibir tratamiento.

Averigüe qué funciona en su caso

Reconocer y expresar sus emociones puede ayudarle a controlar su salud psicológica y física. Al principio, quizás le resultará más fácil hablar con alguien, además del médico, que pueda realmente entender sus emociones. Averigüe qué funciona en su caso:

• Contacte y únase a un grupo de apoyo a pacientes
• Pida a su médico que lo derive a un psicólogo o asesor
• Asista a sesiones periódicas con un asesor o terapeuta

Depende de usted decidir si habla del diagnóstico con sus amigos y familiares. Compartir sus esperanzas, miedos y novedades médicas con otras personas puede acercarles y aliviar su carga.

En primer lugar, piense qué quiere compartir. Puede explicar brevemente qué tipo de TNE tiene, qué tratamientos podría necesitar y cuáles son sus perspectivas a largo plazo o su pronóstico.

Las personas suelen hablar primero con su pareja, después con algunos familiares y amigos íntimos. También es importante que hable con sus hijos para que puedan entenderlo.

Al hablar con los demás, quizá quiera escribir las preguntas que surgen para poder comentarlas con su médico o su equipo multidisciplinar.

Puede sentirse cómodo explicándoselo todo a uno o dos amigos, cara a cara o por teléfono, pero puede ser cansado explicárselo a mucha gente. Pida a sus amigos que le ayuden a explicar su enfermedad si no quiere hablar de ello con su familia más cercana.

Si quiere compartir sus pensamientos con un grupo de familiares o amigos que no viven cerca, puede intentar mantener el contacto con ellos a través de las redes sociales, creando un grupo cerrado de Facebook o un chat con una aplicación en el móvil como WhatsApp o incluso un correo electrónico, carta o llamada telefónica al mes para explicarles cómo le va.

Consejos para explicarlo a los demás

• Saber qué puntos clave quiere compartir.
• Explicar la noticia cuando esté preparado.
• Estar preparado para las preguntas, aunque no tiene que contestarlas todas si no le apetece.
• Fijar límites. No tiene que compartir toda la información del diagnóstico con todos.
• Pedir a un amigo o familiar que le ayude a explicar su enfermedad a otras personas.

Ayude a sus amigos a adaptarse

Sus amigos también buscarán una forma cómoda de hablar con usted sobre el diagnóstico y vivir a largo plazo con el cáncer. Pueden querer indicaciones sobre cómo comportarse con usted, hágales saber cómo le pueden ayudar. Así podrá conocer sus sentimientos y entender mejor sus necesidades.

Hábleles de este sitio web si quieren más información sobre los TNE, por ejemplo, o diríjales a otra información que puedan leer si están interesados.

Algunas personas pueden ser incapaces de afrontar o identificarse con lo que usted les está contando sobre el diagnóstico de los TNE. Se pueden sentir incómodos al hablar de su enfermedad y pueden optar por evitarle para no tener que hacerlo.

No se desanime ante estas reacciones; no todo el mundo se siente cómodo al hablar abiertamente sobre el cáncer. Hay quien es incapaz de escuchar por sus propias experiencias o sus propias emociones, no las suyas.

No deje que esto le influya, a veces será mejor que no hable con estas personas en ese momento. Busque otros amigos y familiares que puedan afrontar mejor su noticia.

En ocasiones, las personas que no quisieron oír hablar de su diagnóstico al principio pueden estar preparados para hacerlo más adelante. Intente estar dispuesto a hablar de sus TNE cuando estén preparados.

Puede ser beneficioso hablar con sus hijos o nietos de forma abierta y sensible sobre su enfermedad. Muchos niños pequeños pueden notar que existe un problema en la familia y si notan que algo falla, pero no saben por qué, pueden empezar a imaginarse lo peor.

Así que tenga una charla sincera con los niños y adolescentes, con un lenguaje que puedan entender. En el caso de niños muy pequeños puede utilizar muñecos o fotos para hacerlo. Explíqueles cualquier cambio de su salud que puede afectarles en su vida diaria. Sus reacciones y necesidades variarán según su edad.