*Los síntomas variarán según la localización del tumor y de una persona a otra.
El sistema neuroendocrino, conocido también como sistema hormonal, está formado por células nerviosas y glandulares llamadas células neuroendocrinas. Estas células liberan hormonas en su cuerpo que, en general, regulan la función de diferentes órganos.
Cuando las células neuroendocrinas cambian y crecen de forma descontrolada, se pueden desarrollar TNE. Los TNE pueden ser no cancerosos (benignos) o cancerosos (malignos).
Los TNE benignos son aquellos que tienden a crecer lentamente y están confinados en un área limitada del cuerpo y, en general, se puede considerar que no son potencialmente mortales si no se comprimen ni sustituyen otras áreas próximas del cuerpo.
Si es viable, los TNE benignos se deben extirpar mediante cirugía o tratarse en sus fases iniciales de desarrollo, porque se pueden diseminar a otros lugares del cuerpo y convertirse en tumores malignos.
Los TNE malignos son aquellos que normalmente crecen más rápido o de forma más descontrolada, que pueden afectar los tejidos circundantes o que han pasado de una área a otra del cuerpo (han metastatizado).
Si no se pueden operar, sigue habiendo otras opciones terapéuticas para las personas con TNE metastásicos.
Habrá oído que los TNE pueden ser funcionantes o no funcionantes. Algunos TNE producen demasiadas hormonas que pueden provocar diversos síntomas y complicaciones, según la localización del tumor y las hormonas que libera. Estos TNE se llaman tumores funcionantes.
A los TNE que no producen hormonas se les denomina tumores no funcionantes, aunque también pueden provocar complicaciones.
Muchas personas siguen llamando tumores carcinoides a los TNE. Es un término antiguo que a veces se sigue utilizando como alternativa a los TNE en general o a los TNE que no se originan en el páncreas.
En 1907, a los TNE se les llamaron tumores carcinoides porque los científicos pensaban que su crecimiento lento significaba que eran tumores parecidos al cáncer pero benignos en lugar de verdaderamente cancerosos (malignos).
Sin embargo, se ha demostrado que los TNE pueden ser también malignos y diseminarse de un lugar del cuerpo a otro, al igual que otras formas de cáncer.
El síndrome carcinoide es un grupo característico de síntomas que pueden tener algunas personas con TNE cuando los tumores del aparato gastrointestinal (digestivo) se diseminan a otras partes del cuerpo, normalmente al hígado. Los principales síntomas de este trastorno son diarrea, enrojecimiento de la piel (especialmente de la cara), dolor de estómago, problemas cardíacos (como palpitaciones) y sibilancias.
Los síntomas pueden variar de una persona a otra y producirse cuando los TNE-GI liberan a la circulación sanguínea una cantidad excesiva de hormonas como serotonina, histamina y somatostatina, entre otras.
El síndrome carcinoide afecta aproximadamente al 10 % de las personas con TNE-GI, incluso cuando el cáncer se ha diseminado. Dado que las hormonas pueden producirse en cualquier momento, las personas con síndrome carcinoide pueden presentar estos síntomas de forma imprevista a lo largo del tiempo. Esto puede tener un gran impacto en la calidad de vida.
Con frecuencia estos síntomas se diagnostican incorrectamente como si fueran signos de otras enfermedades, como síndrome del intestino irritable (SII), enfermedad de Crohn, enfermedad ulcerosa péptica, gastritis o menopausia.
Visite la sección consejos prácticos y herramientas para obtener información sobre manejar los síntomas del síndrome carcinoide.
“Me empezaron a surgir otros síntomas como taquicardias, enrojecimiento de la cara, sobre todo en situaciones de estrés, tanto físico como emocional”
Lugares del tumor primario | Ejemplos de hormonas implicadas | Síntomas principales |
|
|
|
Los síntomas del síndrome carcinoide se pueden desencadenar por estrés emocional y ansiedad, beber alcohol y bebidas con cafeína y consumir determinados alimentos.
Sin embargo, los síntomas del síndrome carcinoide se pueden evitar o mejorar si:
Si no se trata, el síndrome carcinoide puede provocar deficiencias vitamínicas y episodios de diarrea, que pueden causar deshidratación. Sin embargo, la crisis carcinoide es una complicación más grave: es el inicio inmediato de manifestaciones debilitantes y potencialmente mortales de los mismos síntomas que se asocian al síndrome carcinoide. La crisis carcinoide puede desencadenarse por una biopsia o intervención quirúrgica. Asegúrese de que los médicos saben que tiene TNE para que puedan tratarlo en consecuencia.
Descubrir cómo se diagnostican los TNE y qué pruebas
pueden utilizar los profesionales sanitarios para controlar los síntomas de los TNE
Leer acerca de las diferentes opciones terapéuticas para los TNE, como cirugía, radioterapia y medicamentos
Tratar TNELea estos consejos prácticos para ayudarle a facilitarle su vida con TNE